Por muchos años – Particularmente desde antes de 1920— muchos científicos y filósofos pensaban y enseñaban que el universo era infinito (Que no había tenido un principio), incluso se desconocía lo grande que era, se creyó que nuestra galaxia era la totalidad del universo  — era hasta donde los telescopios le mostraban al hombre—

¿Qué diferencia haría al cristianismo si el universo es infinito o tuvo un principio? ¿Son asuntos meramente científicos? No… esto abarca hasta los planos espirituales y conceptuales de lo místico. Esta declaración de que el universo tuvo un principio no es nada agradable para el ateo, por que esto implica que si el universo tuvo un principio, algo o alguien lo tuvo que iniciar, ya que existe un principio filosófico que dice: “DE LA NADA, NADA SALE” y esto impide aceptar que el universo apareció repentinamente sin una explicación lógica y razonable. Mientras que en este asunto, el cristianismo esta cómodamente sentado e intelectualmente tranquilo ya que enseña quien trajo el universo a existencia es Dios. Por que la Biblia dice en el principio creó Dios los cielos y la tierra (Génesis 1:1).

Los adelantos científicos del siglo XX y XXI nos ofrecen material abundante para dejar por sentado que el universo tuvo un principio. Pero desde siglos atrás –XV y XVI- sin ciencia ya se había probado filosóficamente (O matemáticamente) la finitud del universo, apelando a lógica de las matemáticas y cuestionando los infinitos.

Se ha demostrado que lo infinito no es un número real en el mundo, no existe el infinito en las matemáticas aplicadas a la realidad, solo son números ilustrativos. En las ciencias matemáticas existen dos tipos de infinitos, los infinitos reales y los infinitos potenciales. Los infinitos potenciales son un conjunto de números que puede crecer incesantemente al agregar otro número a la serie. Podemos tomar de ejemplo un cronómetro, una vez que se presiona el botón se genera una serie de números (O instantes) que se detendrán o terminarán cuando se vuelva a presionar el botón, pero supongamos que no detenemos el cronómetro sino lo dejamos marcando los segundos sin parar, entonces los segundos llegarían acumularse potencialmente por siempre, y sería una cantidad de segundos sin fin o una cantidad infinita potencial. Pero es importante que no se nos escape que un infinito potencial nunca llegará a ser un infinito real, por lo siguiente.

Los infinitos reales son otro conjunto de números que no puede incrementarse por que debido a su propia infinitud, esta clase de infinito ya incluye todos los números que pudiera haber, no existen elementos o instantes que podamos agregar. Probablemente a Ud. Le cueste trabajo entender o acomodar esto en su mente y es por la sencilla razón de que los infinitos reales no existen en el mundo físico ni pueden llegar a existir. Y para entender este lógica “no existencia” ilustrémoslo con el siguiente ejemplo:

Imagine que Ud. Tiene una colección “infinita” de discos compactos. Y cada disco contiene una colección de canciones infinita, si Ud. Se sentara a escuchar las canciones de un solo disco, escucharía la misma cantidad de canciones que si hubiera escuchado todos los discos de su colección –Una cantidad infinita—De aquí tendríamos que deducir algo absurdo, y es que tenemos dos infinitos de diferentes tamaños. Y supongamos que entre todos sus discos tiene un solo disco de música clásica y todos los otros discos son de música rock, entonces tendría la misma cantidad de canciones de rock que canciones de música clásicas, por que ambos contienen una infinita cantidad de canciones. Todo esto no solo es ilógico sino irracional.

Ahora piense en un piloto profesional de carreras de autos dando vuelta en el autodromo, mientras el da una vuelta de distancia de 1 kilómetro, su hijos de 5 años en un triciclo da 20 vueltas por cada vuelta que da su padre, ambos sin parar se mantienen dando vueltas, si cada uno hubiera circulado una cantidad de tiempo infinita, ambos hubieran completado la misma cantidad de vueltas, el papa no hubiera dado más vueltas sino las mismas vueltas que su hijo. No se frustre, si su cabeza le quiere reventar, esto le permitirá entender por que los infinitos reales no pueden existir en nuestro mundo físico.

Ahora que entendemos que no puede haber un infinito real, podemos aplicar este mismo concepto a un aspecto importantísimo para nuestra reflexión: El tiempo. Si se afirma que el universo siempre existió entonces se está diciendo que el tiempo de su existencia es infinito. Pero analicemos si eso es matemáticamente posible.

En este momento estamos en un (tiempo) presente al cual llamamos ahora. Si ilustramos el “ahora” como un lugar, una central de autobuses. Ahora pensemos que la carretera es el trayecto del tiempo y es una carretera “infinitamente” larga, (No tuvo un principio, por que es infinita) Y Ud. Es un pasajero que espera la llegada del autobús en la central (El ahora), ¿Por cuánto tiempo tendría que esperar su autobús? Por toda la eternidad. Por que no es posible llegar al fin de algo infinito, por tanto no es posible llegar a un lugar en una carretera con una longitud infinita donde no hay un punto final a donde llegar. Pero en la realidad si existe una estación que es el “ahora” un lugar a donde llegar, por lo tanto hay un principio, el tiempo tuvo que comenzar para llegar a ese “ahora” (la estación de autobuses), y si hay un principio de donde sale el autobús ¿Cuánto tiempo debemos esperar que llegue autobús? Una “cantidad medible de tiempo”, por que medimos del ahora hacia atrás a un principio. Por tanto el universo no puede ser infinito por que el tiempo tendría que ser infinito pero lógicamente no puede haber una cantidad de momentos previos anteriores al momento presente, por que no existiría “el ahora”.

Esto es un análisis desde un argumento filosófico, pero es impresionante que en lo siglos pasados con una tecnología mas primitiva, todo este asunto de la finitud del universo era (para algunos) mera especulación, pero desde 1929 esto fue confirmado por la ciencia moderna. Gracias al trabajo y telescopio del Sr. Hubble (Que lleva su nombre) se comprobó que el universo tuvo un principio hace aproximadamente trece millones de años, comenzando en una singularidad.

El científico Edwin Hubble descubrió que las estrellas se están alejando unas de otras (Por tanto las galaxias están en continua expansión) el fue el primero en descubrir que nuestra galaxia es una entre las miles de millones que existen. Descubrimiento que no hubiera sido posible sin su potente telescopio. Hacia el fin de la década estaba abocado al estudio de las galaxias distantes y percibió que la luz se veía diferente de lo esperado. La luz que vio no correspondía a ningún elemento o combinación de elementos conocidos. Luego observo que la luz se desplazaba, de manera uniforme hacia el extremo rojo del espectro, este fenómeno se le conoce como “corrimiento hacia el rojo”. Esto se puede explicar por medio del “Efecto Doppler”. El  efecto Doppler indica que cuando un objeto se acerca hacia nosotros emite ondas de sonido, esas ondas se comprimen o su longitud disminuye. Al disminuir la longitud de onda el tono de sonido se hace más agudo, se eleva hacia un lugar relativamente más alto en el registro. Cuanto más lejos se encuentre el objeto que se mueve en dirección a nosotros, menor será la longitud de onda y más grave el tono. Un ejemplo cotidiano sería cuando en la calle pasa una ambulancia y escuchamos su sirena, a medida que la ambulancia se acerca, el sonido comienza a perder altura y se acerca a su tono real, cuando llega hasta donde estamos nosotros escuchamos el tono real de la sirena y cuando se aleja, poco a poco el tono comienza hacerse más grave por debajo del tono real.

El efecto Doppler también se observa en las ondas luminosas y esto es lo que le permito a Hubble resolver este misterio. El extremo azul de espectro luminoso está compuesto por las ondas de menor longitud, mientras que el extremo rojo está compuesto por las ondas de mayor longitud. En cualquier dirección del universo que Hubble mirara, observaba un desplazamiento hacia el rojo en la azul. Esto significa que los objetos emisores de la luz, las estrellas se alejan unas de otras, por consiguiente el universo está en expansión. Así que su conclusión fue que: Si el universo está en expansión debe de haber un punto o momento inicial de donde comenzó a expandirse. Se hicieron otros descubrimientos que constataron que ahora la expansión es más lenta que cuado comenzó, que fue como una explosión. Esta explosión se conoce como el Big Bang, el comienzo del universo.

Por tanto del argumento filosófico y de los descubrimientos científicos concluimos que: El pasado no es un infinito real por lo tanto debió de haber tenido un comienzo y está teoría es confirmada hoy por los adelantos astronómicos y astrofísicos del presente siglo. Por ende si el universo tuvo un comienzo, tuvo que haber alguien que lo haya comenzado, un responsable de su origen y ese algo o alguien, tuvo que haber sido capaz de planearlo, y tuvo que tener intención de hacerlo, por lo tanto el responsable del universo tuvo que ser algo o alguien pensante. Pero los “algos” no son personalidades y solo una personalidad puede pensar, el “algo” los atribuimos a objetos inanimados, por lo tanto tuvo que ser un “alguien” “Una persona” y esa persona en el teísmo es Dios.